sábado, febrero 15, 2014

ATIENZA: LA AVENTURA DE LA MINERVA



Fue la primera imprenta que se instaló en Atienza, y nos atreveríamos a decir que la única, puesto que no hay datos sobre otras posibles, o posteriores.

   Según parece, y así lo cuenta Juan Diges Antón en “El Periodismo en la Provincia de Guadalajara, apuntes para su historia seguidos de una brevísima noticias de las imprentas establecidas en la misma provincia”.( Guadalajara 1902), la Imprenta Minerva se estableció en Atienza en 1897, en la popularmente llamada entonces “Plaza de los Árboles”, lo que era, y es, la Plaza Mayor.

   La fundó don José María Pascual. Asó lo transcribe Diges Antón;
   Se fundó en Atienza en 1897. Pero mejor será que transcriba el siguiente documento:

“Atienza, 27 de Agosto de 1897.- En este día se hizo la primera prueba de imprimir con una máquina Minerva Americana, de palanca, número 8, procedente de la casa Schomburg y Caballero, de Madrid y adquirida por D. José María Pascual.- Creemos, sin temor a engaño, que esta es la primera máquina de imprimir que ha funcionado en Atienza. Acaso en tiempos remotos, cuando el arte de Gutemberg estaba en sus comienzos y esta villa en mayor prosperidad que la actual, acaso funcionara alguna prensa. No lo sabemos.- José María Pascual.- El impresor, Miguel Estebe.- El aprendiz, José Yangüela”.

   Aquel primer trabajo impreso en La Minerva fue un periódico de dos hojas, de número único, llamado “El Arco de San Juan”, con cabecera del 15 de septiembre de 1897, dedicado a reseñar las fiestas del Santo Cristo.


   Casi un año debió de pasar hasta que el 12 de mayo de 1898, en la misma imprenta, se diese a la luz la revista de Artes y Letras “Atienza Ilustrada”, bajo la dirección editorial de Eduardo Contreras y Jorge de la Guardia como director artístico.
   La reseña sobre la impresión de aquel primer número nos dice:

Esta importante y curiosísima Revista se publica en Atienza. La dirige D. Eduardo Contreras, Jefe de Correos y Telégrafos, notable arqueólogo, escritor festivo y autor de un notable estudio de Viajes y Descubrimientos en el Polo Norte, y otras obras.

   Componen la redacción la señora maestra de niñas doña Isabel Muñoz Caravaca, viuda del catedrático Moya, y los médicos Sres. Solís y La Guardia. Ellos lo escriben, lo dibujan y lo reparten… gratis.

   Detalle curioso: Un número de Atienza Ilustrada fue impreso en una pequeña Minerva, plana a plana, teniendo que descomponer la plana tirada para  componer la siguiente. Como el número constaba de 20 páginas con la cubierta y se hacían 500 ejemplares, resulta que son 10.000 golpes de palanca y tres meses de tiempo.
   El número 1º  costó tanto trabajo como el anterior, que se llamó extraordinario y que se había hecho como ensayo”. 

   La Minerva, aparte de “Atienza Ilustrada”, se anunciaba como imprenta para toda clase de objetos de papelería, aunque todo nos hace pensar que su éxito no duró demasiado tiempo:

   Dos años escasos estuvo en Atienza esta Minerva, porque en 8 de mayo de 1899 la trasladaron a Sigüenza, donde su dueño adquirió otra de mayor potencia, precisamente la que por muchos años tiro El Globo, periódico del insigne Castelar, dedicándose con las dos a trabajos de toda especie que con la tipografía se relacionan”.

   En Sigüenza se estableció en la calle Mayor número 6, donde se imprimirían algunos periódicos, revistas y folletos que han quedado para la historia provincial: El Heraldo Seguntino, o La Ilustración Diocesana Seguntina (fundada por el propio José María Pascual).

Tomás Gismera Velasco