miércoles, marzo 11, 2015

CIPRIANO LOPE, EL GRAMATICO DE ATIENZA



CIPRIANO LOPE,
EL GRAMATICO DE ATIENZA

Tomás Gismera Velasco

   Cipriano Lope González, fue su nombre completo, saltó a la fama nacional a través de la prensa, a raíz de escribir una “Gramática latina”, ensalzada por unos y, como suele suceder, criticada por otros.

   Don Cipriano era uno de esos curiosos personajes que habitaban la Atienza del siglo XVIII, sin que, por el momento, sepamos con cierta precisión las fechas de su nacimiento y fallecimiento, ni siquiera tenemos la constancia de que naciese en Atienza, a pesar de que en Atienza al menos durante 70 años ejerció su carrera, siendo preceptor de Gramática Latina, con indudable éxito en la comarca, ya que eran muchos los alumnos que venían de las provincias limítrofes, a dar clase con él. Si hacemos caso a ese dato, que en Atienza dio clase por espacio de algo más de 70 años y tomamos otro, el de la edición de su última obra, estando ya difunta, obra que fue editada por su primo, don Perimo Calvo y Lope, quien después sería Arzobispo de Santiago, entenderemos que nuestro preceptor de Gramática nació en Atienza en torno a 1750, y debió de fallecer en torno a 1846. Dicho dato nos lo aporta la reseña biográfica del ilustre segoviano Santos Martín Sedeño:



   Don Santos Martín Sedeño nació en el lugar de Prádena (de la provincia de Segovia)… Estudió Humanidades en la villa de Atienza, bajo la dirección del acreditado y justamente célebre profesor D. Cipriano Lope, que tan buenos humanistas dio a la nación en los 70 años que dirigió los estudios de la enunciada villa.

   Esto sucedía con anterioridad  1782, pues para esta fecha Martín Sedeño ya se encontraba realizando otros estudios en Alcalá.

   Respecto a su origen atencino hemos de basarnos en esas mismas afirmaciones de que durante más de 70 años dio clases en Atienza, además de la constancia de que la madre de su primo y editor, Pedro Calvo, doña Ana Lope, era también natural de Atienza, si bien ello no desdice de otros lugares.

LA GRAMÁTICA DE LA LENGUA LATINA
   La Gramática de la lengua latina, se anunciaba en la prensa madrileña…

   …simplificada según un nuevo método por D. Cipriano Lope González, Maestro de latinidad en la villa de Atienza. Redúcense en todo lo posible los preceptos y reglas de la gramática latina que tanto ocupan en los artes que hasta ahora se han seguido, poniendo con esto por obra lo que desde el célebre Brocense han deseado con ansia los doctos, de que se diesen en pocas palabras, aunque con la conveniente claridad, las reglas más precisas para entender la lengua latina.

   Se vendía en Madrid, en la librería de Escribano en la calle de Carretas, frente a la Imprenta Real, a 4 reales. También en el domicilio del autor, y estaba encuadernado en pergamino.

   La prensa de la época no la valoró en mucho, tampoco otro de sus colegas, el preceptor de Gramática de Tarancón que remitió carta crítica a los periódicos de la época:

   Empieza el autor de este papel (nos dicen refiriéndose al taranconés), con una carta en la que da su parecer sobre la Gramática de Atienza, y dice que dado caso que tuviera tal obrita las dotes que la atribuyeron algunas personas por otra parte doctas, jamás llegaría a merecer el excesivo elogio de ser digno de su autor de enumerarse entre los Brocenses, Abriles, Correas, Mayaneses, Iriartes… y va dando su parecer sobre ella y después dice que estando escribiendo esta (también el de Tarancón era autor de otra Gramática que trataba de promocionar), llegó un estudiante que había sido discípulo de dicho Preceptor con un papel en el que ponía reparos a la Gramática de don Cipriano Lope de Atienza,

   El Memorial Literario de Madrid la analizó de arriba abajo, dedicándole no menos de quince o veinte páginas, incluyendo las críticas en todos los aspectos de algún que otro preceptor, entre ellos el de Tarancón:

   Dice nuestro autor que aconseja a sus discípulos que al hacer las oraciones de relativo expresen, y repitan el sustantivo que va precedente, poniéndole en el mismo género… No se puede decir menos que dichos consejos con ridículos, perjudiciales a la juventud…
   ¡Notable alucinamiento! (La obra).
   Muchos son los yerros y descuidos que se notan… Nuestro autor ofrece darnos un tratado del método y orden de estudiar las ciencias, muy diferente de cuantos se han escrito hasta ahora. El pensamiento no se puede negar que es noble, pero en la ejecución y desempeño podrá haber no pocas cosas ni pequeñas dificultades.
   Si yo fuera hombre que pudiera darle un consejo le diría que si lleva adelante tal pensamiento procure no perder de vista algunas reglitas muy oportunas.
  
   El crítico, después de todo, no juzga la obra como se merece, pues según sus líneas, tan solo busca que: como buen patriota me es sumamente sensible que el público gaste su dinero en bagatelas…

   El crítico del Memorial Literario la juzgaba en mejor forma, llegando a compararla con la Gramática de Nebrija en algunos aspectos, mejorándola y adaptándola a los tiempos que corrían. y poniéndola en el lugar que la correspondía, a pesar de que apunta sus errores:

   La obra del Preceptor de Atienza tiene muchos descuidos de imprenta, acaso por haberse hecho la impresión estando ausente, tiene algunos descuidos de lenguaje, especialmente en los versos que no copia; tiene algunos descuidos de propiedad latina, especialmente cuando sique las platiquillas vulgares; pero es loable su intento en tratar la Gramática latina es castellano, en dar previamente, o al mismo tiempo, las nociones de lengua castellana que facilitan los conocimientos de una y otra lengua, en tratar primero lo que da luz a lo siguiente, en definir los términos, dividir los géneros en sus especies y tratar de las propiedades y accidentes de ellas…

   Nuestro paisano no tardará en responder, principalmente al crítico de Tarancón:

   No son siempre los sabios los que se hallan con el derecho de introducir y adoptar palabras nuevas; también el vulgo tiene su derecho, y siempre que el uso haga costumbre quedarán las palabras autorizadas…

   Su respuesta será extremadamente larga, demostrando alguno que otro error de sus críticos, eso sí, concluye despidiéndose con la educación y respecto que lo parecen distinguir: besando a Vmds. las manos, el de Atienza. Cipriano Lope González.


   LA OBRA POSTUMA
   No conocemos de nuestro paisano más que la obra ya comentada, y la póstuma: Paradoja Literaria o Plan de Humanidades.

    Dicha obra, impresa igualmente en Madrid, con posterioridad a su muerte, puesto que se nos anuncia como obra póstuma, fue llevada a la imprenta por el familiar de nuestro preceptor, don Primo Calvo Lope, primo carnal de don Cipriano, cuando don Primo era canónigo de la Real Iglesias Colegial de San Ildefonso de Segovia. La obra, un tomo en 8ª, se encontraba a la venta en las librerías de Sánchez, Rodríguez, Cuesta y Villa.

   Esta obra original (se nos decía) en su clase, comprende un análisis de todas las ciencias e importantes reflexiones sobre la dignidad del hombre y el modo de cultivar sus facultades, descubriendo marcadas tendencias a generalizar los conocimientos útiles y sólidos, sin excluir ningún estado ni sexo. Es por lo tanto utilísima no solo a los profesores de colegios, sino a todo el que tome algún interés en los adelantos humanos. 

En: Atienza de los Juglares/Febrero 2015