JACINTO ABÓS VALENCIA
Tomás
Gismera Velasco
Jacinto Abós Valencia nació en el seno de
una familia de farmacéuticos afincada en Samper de Calanda, en la provincia de
Teruel.
Continuando la tradición familiar, también
Jacinto cursó estudios de Farmacia, en la Universidad Central de Madrid, donde
se licenció en 1873.
De regreso a su localidad natal, se empleó
en la farmacia familiar, hasta que dos años más tarde salió a licitación la
plaza de farmacéutico de Jadraque, a la que opositó, logrando el puesto.
Trasladado a Jadraque no tardó en hacerse un
hueco en el mundo cultural de la población, a la que por el mismo tiempo llegó
como médico Bibiano Contreras acompañado de su familia, ante todo de su hijo
Eduardo, entonces estudiante de Medicina, estudios que dejaría para opositar a
un puesto en las oficinas de correos y telégrafos de la provincia, acompañado
de Jacinto Abós. Ambos lograron plaza, quedando Jacinto Abós en Jadraque, y
marchando Eduardo Contreras a Atienza. Ambos fueron nombrados con el paso del
tiempo Jefes de sus respectivas oficinas.
Jacinto Abós, además de los cargos de
farmacéutico y oficial de correos y telégrafos, sería un entusiasta publicista
de Jadraque, escribiendo sobre la población en la práctica totalidad de los
medios de prensa de la provincia, y siendo, además corresponsal de algunos
otros de Madrid, entre ellos la Gaceta Oficial.
En Jadraque, en la década de 1890, se
convirtió en un referente cultural, reuniendo en la rebotica de su farmacia a
lo más granado de la vida pública y social del pueblo, a la que arrastró hacía
algunos de sus sueños culturales, entre ellos la creación de un grupo de
teatro.
Apasionado de la fotografía en sus
comienzos, fue un pionero en la provincia a la hora de retratar con su cámara a
personajes y monumentos, tanto de Jadraque como de otros muchos puntos de la
provincia, dejando las primeras imágenes para el futuro del tipismo folclórico
provincial.
Fue,
junto a Eduardo Contreras y Jorge de la Guardia, médico este de Miedes, uno de
los ejes sobre los que se cimentó la revista Atienza Ilustrada, nacida en 1898,
y que más tarde pasaría a denominarse Alcarria Ilustrada, e incluso cuando
desapareció la revista y sus colaboradores pasaron a formar parte del nuevo
sueño periodístico de El Briocense, estuvo dispuesto en todo momento a la
colaboración, cuando su enfermedad, ya por entonces persiguiéndole, se lo
permitía.
En Jadraque se casó con Paulina Sánchez, de
cuyo matrimonio nacieron dos hijas, Soledad y Conchita.
La desgracia quiso que sus hijas falleciesen
a tempranas edades, Soledad al cumplir los 22 años de edad, en 1899.
Concepción, unos meses más tarde, siendo maestra de la escuela de niñas de
Jadraque. De pena, meses después de enterrar a las hijas, moriría Paulina
Sánchez.
Jacinto Abós, rodeado de la admiración
popular, llegaría a ser toda una institución en el Jadraque de los comienzos
del siglo XX, hasta que se lo llevó la muerte en Jadraque el 3 de febrero de
1915, dejando como herencia una enorme colección fotográfica que pasó a manos
de quien permaneció junto a él hasta los últimos momentos de su vida, su
sobrino Joaquín Aguilar.