martes, abril 21, 2015

LIGERO DE EQUIPAJE



LIGERO DE EQUIPAJE

   El 22 de enero de enero de 1939, ante la inminente caída de Barcelona en poder de las tropas del general Franco, Antonio Machado, su madre doña Ana Ruiz, su hermano José y su cuñada, Matea Monedero, salieron desde la Torre del Castañer, en el Paseo de San Gervasi, donde se encontraban refugiados, camino del exilio.

   Salieron de Barcelona bajo el bombardeo de la aviación alemana, al servicio de las tropas franquistas y, tras unos días de incertidumbre, cruzaron la frontera francesa, a pie, el día 27.  dos días después se encontraban en Colliure.

   Es la imagen de la derrota de las ideas, del exilio y de la muerte, no sólo del poeta, también de una parte de la España que batalló en ambos bandos enfrentados. La imagen de los exiliados por los caminos, de quienes lograron pasar al otro lado, ante la incertidumbre de lo que quedaba atrás, quedó reflejado en los últimos días de Antonio Machado, en la expresión de sus ojos y en su tristeza. La que, agravando la enfermedad que padecía, lo llevó a la muerte.



   Es el corazón del relato que bajo el título “Ligero de equipaje”, ha resultado ser uno de los premiados en la Primera Semana de la Novela Histórica, celebrada el pasado fin de semana en Quintanar del Rey, en la provincia de Cuenca, donde se reunieron a debatir sobre este tipo de narrativa, autores, narradores, editores y público en general. Tres días de charlas, conferencias y presentaciones literarias, con el colofón del fallo final del premio dedicado a la narrativa breve de carácter histórico.

   Un comité de cincuenta lectores debían de elegir los 10 mejores relatos de entre las decenas participantes en el evento. Al final, fueron 7 los elegidos, representando a Europa y ambos Américas. Participaron autores de nueve nacionalidades distintas. De entre los premiados, tres españoles y cuatro americanos. De entre los españoles, el mío. De la Atienza y la Guadalajara natal.

   Los siete relatos premiados han pasado a formar parte de un libro que gratuitamente se distribuyó entre los asistentes, en un acto presentado por Ramón Márquez (Ramoncín), y con la presencia de alguno de los escritores dedicados a novelar la historia, entre ellos Fernando Sánchez Dragó y Alberto Vázquez Figueroa.

   Aquí os dejó “Ligero de Equipaje”, mi relato, por si le queréis echar un vistazo y comprender que las guerras, como la vivida por los españoles entre 1936/39, sólo sirven para una cosa: provocar el dolor y la muerte de los más inocentes. A pesar de que siempre haya quien, pasados los años, continúe levantando la bandera de “los que ganaron la guerra”. Una lástima que haya personas que, sin conocerla, sigan pensando así. Es el efecto de la incultura, y de la insensibilidad hacía el dolor que los intereses políticos siempre provocan.